Recibidor del Castillo

**Dama Negra** Mar Jul 21, 2009 9:58 pm

Cuando se atraviesan las puertas de entrada al castillo, el primer lugar que se encuentra es el Recibidor. Desde que los Mortífagos llegaron, el lugar está algo más descuidado. Las escaleras que conducen al primer piso han quedado totalmente obstruidas por los escombros, aunque los restos de piedra dejan un par de escalones a la vista.
Las puertas circundantes conducen a distintas áreas del nivel inferior: el Gran Comedor, el Pasillo de los Trofeos, las Mazmorras... y una puerta oculta a miradas indebidas, que conduce a un lugar al que sólo los portadores de la Marca Tenebrosa pueden acceder...

**Shilaria R. Di Vornesco** Jue Jul 23, 2009 9:22 pm

Las últimas luces de la tarde aún iluminaban el cielo y los exteriores del antiguo colegio ahora en ruinas, y se colaba por las ventanas del recibidor, en su mayoría rotas, haciendo que su luz se viese reflejada en los cristales del suelo produciendo distintos efectos lumínicos en la estancia penumbrosa.
Las puertas del Recibidor se abrieron a la par dejando ver la silueta de la chica de ojos fríos y pelo negro que acaba de entrar y avanzaba por la estancia mirando todo con cierta indiferencia, aquella sala le resultaba tan monótona como el sonido chirriante y molesto que producían las puertas al abrirse o cerrarse en aquel lugar, algo que acababan de hacer. Paseaba su mirada cubierta por las gafas de sol por las distintas puertas de los bajos de aquel sitio mientras subía los primeros escalones que dejaban ver los escombros, escuchando el eco del sonido de sus tacones en el lugar hasta que se detuvo, apoyándose en una de las grandes piedras que obstruían el camino a pisos superiores, mientras miraba el lugar con aire pensativo y sumiso.

**Nathaniel W. Moon** Jue Jul 23, 2009 9:35 pm

Siguiendo las sombras cada vez más alargadas que rodean al majestuoso castillo cada vez más en ruinas, un joven de presencia atractiva se acerca a la puerta de entrada del mismo. Al acercarse a las puertas se percata de que una muchacha ha entrado antes que él y antes de entrar en la estacia la observa escondido tras la puerta. No estaba mal, no. Quizás entre torturas y matanzas de renegados pudiese darse un festin. Finalmente decide entrar en la estancia. Lo hace en un completo silencio, sin dejar que sus pasos retumben en el eco de la habitación. Poco a poco se acercaa donde la chica se había situado y la mira de arriba a abajo.
- Esto puede ser interesante- Murmura tras su repaso. Después le orfrece a la chica una sonrisa y le tiende la mano para saludarla como es debido.- Nathaniel Moon, un placer poder admirarla- le dice con una sonrisa autosuficiente

**Nazareno J. Ludueña** Jue Jul 23, 2009 9:44 pm

Cuando ya la noche tragaba la tierra, llega un muchacho, entrando al recibidor con un paso demasiado indiferente, que muy posiblemente ocultaba cierto orgullo, mirando a su alrededor y apreciando ciertos detalles como los dibujos de la piedra. Cosas que ya nadie apreciaba.
Se detuvo en seco al observar otras dos personas, y enarcó una ceja. Como si nada, hizo un típico gesto de saludo con la mano, quizá observando de más a la muchacha, para volverse y alejarse a seguir apreciando la piedra, y apreciando el silencio, probablemente interrumpido en unos minutos.

**Shilaria R. Di Vornesco** Jue Jul 23, 2009 9:47 pm

Desde que las puertas se habían abierto de nuevo tenía la mirada puesta en el lugar de procedencia de la luz, a pesar de que la dirección de su mirada siguiendo las gafas fuera hacía una de las paredes de aquel antro ruinoso y sin embargo sobrecogedor. El chico que entró era alto y prepotente, o al menos, aquella era la imagen que le dio a primera vista mientras se acercaba, sigiloso como una serpiente a las escaleras para acercarse a ella, fue entonces cuando sí, decidió mirar hacia la pared para comprobar que por la ventana a penas entraba luz, y fue entonces cuando subió sus gafas, utilizadas ahora en forma de diadema para ladear la cabeza y mirar al hombre con la misma expresión de indiferencia que traía nada más entrar. Clavó su fría y penetrante mirada en los ojos azules, algo menos llamativos, de él y después mirar su mano, sin hacer siquiera ademán de tomarla. Volvió la vista a la puerta u esperó unos segundos para volverle a mirar con una media sonrisa más macabra que sincera.
- Shilaria – Dijo sin más, los apellidos sobraban para él – Disfruta de las vistas… Por que es lo único que conseguirás acercarte a mi – Dijo ensanchando su sonrisa, como habiendo leído las intenciones del muchacho, le encantaba poner las cosas difíciles, siempre lo habría hecho y seguiría haciéndolo.
Mientras se percató de la entrada de una nueva figura, prestándole una mínima atención felina, la que le mantenía alerta de todo lo que sucedía a su alrededor, y le dedicó una mirada fría pero a la vez intensa,casi atrayente, a modo de saludo.

**Dama Negra** Jue Jul 23, 2009 9:58 pm

Un viento repentino agitó el Recibidor, apagando algunas antorchas y azotando el cabello de la única mujer allí presente. El viento se concentró en el escalón más elevado que se salvaba de los derrumbamientos. Una figura alta y esbelta, tremendamente imponente, cubierta con una capucha que sólo dejaba a la vista unos vagos rasgos de su rostro, apareció allí de la nada, con una túnica negra como la noche sin estrellas, ondeando al aire.
- Buenas noches, mis Mortífagos -les saludó, con una voz que sonaba como el susurro del viento azotando las hojas de los árboles.

**Shilaria R. Di Vornesco** Jue Jul 23, 2009 10:09 pm

Una repentina oleada de viento captó su atención mientras sentía como el pelo le golpeaba en la cara debido a este y cuando más o menos cesó, convirtiéndose en una leve brisa dirigió su mirada hacía la figura encapuchada que tan bien conocía, era ella, la sonrisa se esfumó de su rostro convirtiendo aquello en unos labios bien perfilados pero serenos, realizó una reverencia de respeto, más masculina que femenina, casi rozando con la rodilla el frío suelo de mármol.
- Buenas noches mi Lady – Dijo sin levantarse ni perder aquella postura, con la mirada alzada y puesta en la encapuchada

**Nazareno J. Ludueña** Jue Jul 23, 2009 10:10 pm

Una media sonrisa se le formó al oír la respuesta de la tal Shilaria.
Una buena respuesta combinada con un buen nombre, no cabía duda. Y los ojos de ella eran interesantes, había de admitirlo.
Pero la cantidad de fascinante historia que guardaba la piedra, quizá lo era más.
No estaba seguro, pero tampoco tenía para qué estarlo.
Levantó una mano y rozó con la punta de los dedos aquellas paredes tan imponentes, casi con devoción...
Y fue entonces cuando una figura, aquella que estaba esperando, hizo su aparición.
Inmediatamente, se hincó de rodillas, haciendo una reverencia, sin dejar de sonreír.

- Buenas noches, querida ama... o Dama, como prefiera usted- Dijo, hablando por primera vez, denotando una voz suave y gruesa a la vez, algo curioso.

**Alejandra Ginevra Swan** Jue Jul 23, 2009 10:11 pm

Se las apaña para colarse en el Recibidor instantes antes de que la Dama denote su presencia. No deja que los recuerdos sobre ese lugar nublen su buen juicio. Camina con los brazos cruzados y la cabeza alta hasta situarse junto al resto de Mortífagos, a los que saluda con un gesto de cabeza, sin reparar en la presencia de un viejo conocido como Naza. Después, lentamente, devuelve el saludo.
- Buenas noches, señora.

**Nathaniel W. Moon** Jue Jul 23, 2009 10:14 pm

Se había quedado algo hipnotizado con la mirada y las palabras de la chica. Siempre habian sido una debilidad para él las mujeres como ella, bueno en realidad todas las mujeres. Sintió la llegada de aquella a quien buscaba y saludo con una leve reverencia, ni siquiera la mitad de exagerada que las de sus compañeras.
- Buenas noches mi lady.

**Dama Negra** Jue Jul 23, 2009 10:16 pm

- Buenas noches a todos.
Recorrió con la mirada, fríamente, las paredes de aquel castillo que se había convertido en su nuevo... "hogar", por llamarlo de algún modo.
- ¿Sabéis por qué os he convocado hoy aquí?

**Shilaria R. Di Vornesco** Jue Jul 23, 2009 10:18 pm

Se puso en pie y guardó silencio, aquellas preguntas solían ser retóricas, de todos modos la respuesta casi estaba en el aire, o se podía deducir, sin llegara decir completamente que era la correcta. Paseó la mirada fugazmente por cada uno de los presentes, notando la llegada de una mujer “peculiar” para después volver la vista a su señora atentamente, esperando oir la respuesta para confirmar o anular sus posibles teorías sobre aquello.

**Nazareno J. Ludueña** Jue Jul 23, 2009 10:20 pm

Negó con la cabeza, por mera cordialidad, levantando la vista para poder observar a sus compañeros. Otra media sonrisa se le formó al darse la grata sorpresa de encontrarse con una vieja conocida, Ale. Al verla, otra figura apareció en su cabeza, aquella que tantos quebraderos de cabeza le había dado.
Rápidamente, volvió a mirar a aquella dama encapuchada.
Era obvio. Se podía intuir con facilidad, ya que todos tenían los mismos objetivos. Guardar silencio era prioritario.

**Alejandra Ginevra Swan** Jue Jul 23, 2009 10:25 pm

Nadie contesta. Se limita a asentir y a pronunciar unas amargas palabras.
- Supongo que por esos molestos renegados del pueblo de al lado, señora.
Dicho lo anterior, pasea la mirada por todos los presentes. Una enigmática señorita, un atractivo caballero y... su imaginación le estaba jugando una mala pasada. Pero él también parecía haberla reconocido. Le dedico una media sonrisa a Naza, amarga como sus palabras. No era momento para reencuentros felices. Volvió a mirar a la Dama, expectante.

**Dama Negra** Jue Jul 23, 2009 10:28 pm

- Os he convocado aquí... porque empieza la diversión.
Descendió los dos escalones y paseó entre ellos, por mero entretenimiento. Paseó uno de sus suaves, albinos y gélidos dedos por el cuello de Ludueña antes de girar en torno a Swan y pasar al lado de Di Vornesco.
- Un grupo de magos se ha asentado en el pueblo de Hogsmeade, por lo que tengo entendido. Eso significa... que querrán pararnos los pies, echarnos de aquí, volver a convertir esto en una vulgar escuela de magia básica. Pero, por supuesto, se encontrarán... "obstáculos".

**Nathaniel W. Moon** Jue Jul 23, 2009 10:31 pm

Se quedó esperando una respuesta a quella pregunta. Se notaba en el ambiente para lo que habían sido llamados y no le era necesario responder a aquella pregunta tan obvia.
Observó a sus acompañantes durante unos segundos. El único chico que había parecía que no concordaba mucho alli, tenñia pinta de pegar más en otro sitio, un sitio donde poder admirar las piedras a su gusto. La chica de los ojos claros, la tal Shilaria llamaba la atención sobre las otras, incluso sobre la Dama Negra. La otra chica era mona, pero no era de su estilo. Dama tenía buena pinta, pero sabía donde estaban sus limites y dama se salia de ellos.
Escuchó a Dama y simplemente sonrió mostrando los afilados colmillos asientiendo a la referencia a los obstaculos.

**Alejandra Ginevra Swan** Jue Jul 23, 2009 10:33 pm

La expresión de su rostro se torna serena, firme, cuando la Dama pasa a su lado, en señal de respeto. Nota el poder que emana de ella y escucha atentamente sus palabras.
- Ilusos... ¿Sabe el nombre de alguno de ellos, Señora?-musita con la indiferencia más absoluta que es capaz de mostrar.

**Shilaria R. Di Vornesco** Jue Jul 23, 2009 10:33 pm

Escuchó a su señora sin perderla de vista y una sonrisa maquavélica se fue dibujando en sus labios, al proncipio leve y poco a poco se fue exagerando hasta culminar en una estridente risa que duró unos escasos segudos para después quedar reflejado en su mirada la gracia de aquel asunto y en su sonrisa la previa diversión que sentiria.
- no, no, no - Dijo con una leve voz cantaría, melódica y delícada, pero tan cortante como una brisa invernal - No pueden hacer eso... - Dijo casi con inocencia, inocencia que se turbó a continuación - Por que no les vamos a dejar

**Nazareno J. Ludueña** Jue Jul 23, 2009 10:35 pm

Sonrió aún más, socarronamente.
Se preguntaba quienes eran. Desde hacía tanto tiempo no veía a algunas personas...
Contuvo la respiración al sentir los dedos de la Dama Negra en su cuello, con los ojos firmemente cerrados... como hablando con otra persona, tratando de ignorar aquella sensacion tan extraña que producía su ama.
Una leve risa, muy suave y ligera, casi imperceptible, se le escapó.

- Me gusta como suena eso, mi lady- ... O en realidad no lo sabía. Había ciertas cosas que nunca cambiarían.

Oyó a Ale, y enarcó una ceja. Ella parecía fuera de lugar allí... no porque no pareciese un mortífago. Sino porque su personalidad habría de cambiar mucho para serlo.
En cambio, Shilaria estaba clavada.

**Dama Negra** Jue Jul 23, 2009 10:37 pm

Asintió, conforme. Se giró por completo hacia Swan. Si sonrió, no lo aparentó. Era conocida por su rostro impenetrable e inexpresivo, e hizo gala de sus dotes para averiguar lo que ocurría a distancia.
- Ahora mismo hay dos... Swan y Cullen.
Swan... ¿Cómo le sentaría eso a Alejandra?

**Shilaria R. Di Vornesco** Jue Jul 23, 2009 10:41 pm

Sin borrar aquella diablesca y siniestra sonrisa de su mirada escuchó atenta los nombres que dijo y cerrando un instante los ojos y olisqueando el aire se centró el as vibraciones del aire, captando dos esencias, sí, desonocidas, traidas por la brisa veraniega desde el pueblo más frío de toda aquella zona... sin duda... Cullen y Swan, una esencia confundible con la de la mortífaga que al parecer era su compañera, pero no idéntica, se quedó con los olores, no lo olvidaría y por el bien de aquellos dos, que no tuvieran la suerte de encontrarse en su camino.

**Nazareno J. Ludueña** Jue Jul 23, 2009 10:43 pm

La sonrisa menguó casi imperceptiblemente.
¿Cuál Swan?
Cerró los ojos aún con más fuerza. Curiosamente, de repente se tranquilizó. Y volvió a sonreír, aunque en el fondo, la sonrisa era amarga.
Y Cullen. Si, le recordaba bien...
Hizo un gesto curioso con la cabeza, sin definirse si de aprobación o de otra cosa.
Suya no era la culpa de querer, en ese momento, matarles.

**Alejandra Ginevra Swan** Jue Jul 23, 2009 10:48 pm

Mantuvo la mirada fija en la Dama, sin pestañear, ni denotar ninguna expresión en su rostro. Ninguna, ni tristeza, ni sorpresa, ni preocupación. Su rostro se mantuvo impasible, hasta que despegó los labios para enunciar, con la más absoluta tranquilidad, imparcialidad e indiferencia que fue capaz, y dejando entrever un tono... peligroso en sus palabras mientras mantenía los brazos cruzados sobre su pecho:
- Habrá que darles una lección, entonces. Para que se estén quietecitos y no se metan en asuntos que no les atañen. - acabó la frase en una media sonrisa, con la mirada aún fija en la Dama, como si aquello fuera una prueba que se hubiera impuesto ella misma de fidelidad a los Mortífagos.
Se sorprendía de su propia indiferencia sobre el asunto. Una de sus hermanas... Y Once estaban ahí abajo. Después de no verlos desde hacía tantos años, lo único que se le ocurría era darles una lección. Divino, Ale. Menos mal que inconscientemente has dicho darles una lección, en el fondo sabes que no quieres hacerles daño. Aún queda un rastro en tí del apego a tus amigos que tanto has querido borrar...

**Dama Negra** Jue Jul 23, 2009 10:48 pm

Mantuvo la concentración un rato, con los ojos cerrados, ausente, buscando captar más presencias.

Cena.

**Nathaniel W. Moon** Jue Jul 23, 2009 10:49 pm

Cullen y Swan. No es que se interesara por los nombres de sus victimas, pero le divertía saber como llamarlos en caso de que les diera tiempo a hablar. Siguió escuchando a Dama y a sus compañeros y ensanchando sus sonrisa autosuficiente preparado para atacar. Si había que hacerlo ahora mismo tomaría su forma lobuna, con ella no tenía reparos en matar a ninguna mujer que se le pusiera por delante, en su forma humana se le hacía más dificil.

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