Lago de Hogwarts

**Dama Negra** Miér Jul 22, 2009 1:46 pm

Un lago enorme y de aguas tranquilas y oscuras que bordea los terrenos y se aleja hasta las zonas lejanas. Cuentan que en el lago se esconden sirenas, tritones... pero no sólo eso. Dicen que el calamar gigante descansa en las profundidades de sus aguas... y que no está solo.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 1:44 am

Se había aparecido en los terrenos de Hogwarts, un lugar cuyyos recuerdos no eran del todo malos, al menos no cuando iba allí a recoger los ingredientes para las pociones, por que ella, al contrario que la mayoría de sus compañeros en Hogwarts, no compraba los ingredientes, los buscaba, los daba caza, y eso fue lo que desde un momento de su infancia agudizó sus sentidos furtivos.

Había decidido caminar un poco, sin un rumbo general, ya que la noche era fresca y las gotas de lluvia habían dejado de caer, aunque aún, a lo lejos podían verse rayos caer desde las enegrecidas nuves que cubrian el cielo y su astro más potente dejandolo en una curiosa oscuridad, pero que sin saber de donde, seguia teniendo una bella luz nocturna, y así fue, como caminando sumida entre sus recientes pensamientos con Swan, llegó al lago y se detubo al ver la gran masa de agua ahí reunida, su corazón le dió un vuelco y decidió enfrentarse un poco a sus miedos, acercandose lentamente al lago, paso a paso, poco a poco, hasta quedar a 7 metros de la orilla y aún así aquella distancia le parecia poquisima, y luchaba con las ansias de retroceder, quedandose inmovil, con su rostro impasible y su mirada indicando que esta vez ella era la que estaba helada.

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 1:50 am

Una piedra degran tamaño cae desde el aire sobre las aguas del lago, elevando una lluvia de gotas de agua que se esparcen con fuerza, salpicando a su alrededor. Resuena una carcajada y Morrigan se deja ver, llevando todavía la varita en la mano, que ha utilizado para hacer volar la piedra. A pesar de ir calzada con unos tacones de respetable altura, se las apaña para caminar sin tambalearse pese a las dificultades del terreno que pisa.

- De todos los lugares en los que esperaba encontrarte, Shila, este era precisamente el último de mi lista - si había elegido el lago para dar un paseo nocturno, era precisamente porque no esperaba encontrarla por allí, dada su aversión por el agua, pero igualmente había sido incapaz de resisitirse a darla un pequeño susto.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 1:58 am

La piedra que cayó desde el cielo no fue lo que la sobresaltó en el primero momento, pero en cuanto chocó con el agua, levantando así su estabilidad y dejando que pequeñas gotas salpicase, sin pergó un respingo sobresaltado al tiempo que retrocedió y eso la hizo perder el equilibrio y casi caer al suelo. No solía perder el equilibrio y menos con las botas que llevaba hoy, si fueran las comunes de tacón de aguja... bueno, pero en aquella ocasión llevaba un arsenal más cómodo, unas botas militares, y sin embargo aquel sobresalto de imaginarse una ola cayendo seobre ella la había hecho perder estabilidad.

Al escuchar una voz se giró, y clavó una mirada asesina en Morrigan, aquello había sido muy cruel, sobre todo en ella, que sabía muy a ciencia cierta su debilidad, creada en el orfanato a base de castigos. Tragó saliva silenciando los pálpitos continuos y veloces de su corazón y camuflando su mirada por una más segura que denotaba que quuerría vengarse por ello.

- Pues no veo por que - Dijo recuperando por completo la compostura y alejándose un poco más del lago, un par de pasos, con disimulo, para retirarse unos tres metros más - Yo tampoco esperaba que me encontrases a estas horas, pensaba que estarías durmiendo, un cutis así necesita descansar durante la noche, o eso dicen - Comentó ya totalmente relajada en apariencia y palabras.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 2:01 am

Una sombra lupina observaba la escena desde la sombra que los arboles del bosque lanzaban sobre el lago. No qqueía acercarse más ya que prefería estar atento para dar una sorpresa en el momento exacto. Observaba a las dos figuras femeninas con los ojos entornados, buscando en sus pensamientos alguna conexión entre ambas y esperando el momento en el que ambas decidieran atacar para salir a ayudar en la lucha. Que bando sería el elegido era ya otra cuestión, aunque tenía una ligera idea sobre la chica que recibiría su ayuda

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 2:07 am

Rie calladamente, satisfecha por la alteración que había causado en Shilara, aunque ésta tratara de camuflarla. Sabía a ciencia cierta que se arriesgaba a desatar las iras de la mujer evidenciando de aquel modo que conocía su posiblemente único punto débil, y no sólo eso, sino aprovechándose de él para provocarla, pero el aburrimiento, por una parte, la impulsaba a actuar así, y por otra, aunque no solía recurrir con frecuencia a este tipo de métodos, nunca había sido capaz de resistirse a hacerlo con determinadas personas, era algo instintivo, y Shilara formaba parte del grupo elegido, por muy peligroso que fuera.

- A diferencia de para otras personas, a mi cutis, ya mi persona en general, la vida nocturna y las emociones fuertes le van de maravilla - repasa a Shila con la mirada, constando una vez más las muchas diferencias que existían entre ambas; mientras que ella, a pesar de lo avanzado de la noche, iba vestida como si se dirigiesea una fiesta segura, Shila continuaba haciendo gala de un estilo que podía definirse cuanto menos de peculiar.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 2:15 am

Sentía la presion de la cercanía a las aguas demasiado cercana a sus emociones y la humedad del terreno le trajo un olor familiar, como el que suelen traer los perros mojados solo que más leve, este perrito no debería estar mojado, y solo conocía a uno con ese olor tan... curioso, sabía que estaba cerca pero no iba a ponerse a pensar donde.

Sacó la varita ante la mirada que había catalogado como despectiva de Morrigan, eso de que la mirasen de arriba abajo queriendo decir un: Bah, que vulgar. No le gustaba ni un pelo, y ya veía bastante ansiosa de algo tras el encuentro con la auror, aunque desde luego a ella no le tenia tantas ganas como a su antigua compañera que posiblemente fuese una de las únicas que conocían aquella debilidad, y que además no dudaría en usarla cuando le viniese en gana y vendería la información a cualquiera en caso de que le interesase.

- ¿Y que tal le sientan a tu cutis los cotes? - Preguntó de forma retórica, alejandose más del agua con la idea de tener una mayor cercanía en puntos de vista a Morrigan para después realizar el movimiento y la pronunciación interna de tres diffindos, uno tras otro.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 2:19 am

Supo que Shila intuía que estaba cerca pero aun no se quería mostrar. Prefería seguir mirando la escena en la lejania ya decidido sobre qué bando iba a recibir ayuda extra de un lobito.
Rió entre dientes al ver como su gatita atacaba a la otra. Su risa fue baja y sonó como un gruñido bajo de pecho. Solo los entendidos en animales hubiesen adivinado que era una risa y no una amenaza.

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 2:22 am

Un sentimiento de inquietud, como una punzada, se adueña de ella al ver moverse a Shilaria, alejandose del agua, y sobre todo al verla sacar la varita. Se le pasa por la cabeza que tal vez debería haberse ahorrado la provocación, pero es tarde para eso, y a ella le apetece jugar; además, la cercanía del agua juega a su favor, pero tiene la íncomoda sensación de que hay un par de ojos clavados en ellas de sobra.

- Pues los cortes no le van muy bien... - va a seguir hablando, pero el mismo instinto que la ha advertido antes para ponerse en guardia, la previene ahora de que el ataque es inminente. Alza la varita, lanzando un protego que la protege de los hechizos, aunque sin evitar de uno de ellos impacte, más ligeramente de lo que sin duda Shila habría deseado, contra su mejilla, haciendola sangrar.

- Yo que tu no habría hecho eso - sisea, rabiosa; que la dañasen fisicamente era algo imperdonable - por si no te has dado cuenta, aquí hay algo que a ti no te gusta mucho, Shila... - apunta hacia el lago, levantado una lengua de agua, que dirige a continuación hacia la figura de Shilaria.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 2:38 am

Sonrió al ver que al menos uno de los hechizos cortaba su mejilla, quizá demasiado levemente pero aquello era suficiente como para hacer enfadar o fastidiar a Morrigan, tendría que plantearse que daños podría hacerle a su ropa, y ya tenía uno bien pensado, aunque le dolería hacerlo a un traje que realmente era bonito para una gala y al escuchar lo primero sonrió, de echo había conseguido lo que queria y ahora ¿La amenaaba? Ella no tenía poder sobre sus actos, o eso pensó hasta que escuchó lo que parecía ser una advertencia más bien divertida, y siguiendo la trayerctoria de la varita vió alzarse una lengua de agua, como una enorme ola que tenía su parada en ella. Cerró los ojos realizando un incendio, su elemento estaría en debilidad por la humedad, pero no quería controlarlo para la ofensiva, en aquellas discustancias y con el miedo que ahora se había apalancado en su cuerpo no podría, así que simplemete se creó un potente escudo de llamas que frenó la mayor parte del golpe, evaporando el agua, aunque finalmente fue extinto y al menos al pitad de la lengua dió impacto en ella, calandola por completo y derribándola, una cosa muy distinta era ducharse y otra aquello.

Tosió escupiendo algo de agua que le había entrado en la boca y se puso en pie tiritando y no precisamente de frío, detestaba que conociesen aquello pero su mente ahora se centraba en alejarse del lago y no podía evitar ser retenida allí por un impulso de venganza

- ¡Densaugeo! - Dijo furiosa.

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 2:45 am

La indignación alcanza su cota máxima al escuchar el siguiente hechizo de Shila, ¿qué pretendía, hacer de ella un adefesio? Aunque al menos había logrado empaparla en su mayor parte, eso ahora carecía de sentido, no era suficiente, y para colmo, el corte en la mejilla escocía una barbaridad y no dejaba de sangrar, cuanto más tardase en arreglárselo más posible era que le quedase una cicatriz. Se protege del malefcio como puede, y hace llover sobre Shila un par más de trombas de agua, mucho menos efectivas que la primera, ya que únicamente son una distracción, mientras pronuncia mentalmente un sectusempra.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 2:52 am

Al ver la cantidad de agua que se le iba a venir encima se echo para atras cayendo de culo y retirandose arrastrándose esquivando el agua que solo caló en sus pies, sin embargo en su rostro podía verse el horror el pánica que sentía, y su mirada era algo que también confirmaba aquello, pero por suerte al haberse apartado no solo había esquivado el agua si no el rayo del sectusempra.

Sus ojos podían haber denotado las lágrimas de no ser por que estaba calada de pies a cabeza, estaba aterrada y no sabía si quiera si podría reaccionar, pero aprovechó aquella adrenalina que la paralizaba para volverla en su defensa, el agua en ese sentido a una ducha no acabab de aterrarla del todo pero la imagen de que esta le arrastrase hasta el lago como las olas al mar...

- ¡Incarcero! . realizó con un grito casi quebrado al final, si conseguia atar a Morrigan se quitaría el problema del agua.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 2:56 am

En su forma de lobo pudo comprobar que a Shila no le gustaba la idea del agua sobre ella y verla sufrir innecesariamente de aquella forma no le gustaba. Así que volvíó a su forma humana unos segundos, los suficientes como para poder congelar la superficie del lago y evaporar el agua que rodeaba a la pantera. Sus poderes de aguamante eran tan extraordinarios que en menos de 5 segundos ya había vuelto a su forma animal y siguió atento a la lucha entre las damás ya mucho más preparado para atacar si hacía falta

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 3:05 am

Maldice por lo bajo, le habría gustado que Shilaria se desangrase, supondría librarse de una espina que tenía pendiente desde su niñez, pero aún podria arrancarla de raiz, con un poco de suerte. Haciendo acopio de energia, vuelve a apuntar hacia el lago, esta vez pensaba arrastrar a Shila hasta que acabase sumergida de lleno en él, cuando repentinamente, la superficie del agua se congela parcialmente, privandola de su ventaja sobre la mujer. En ese momento, Shilaria lanza contra ella un inarcero; de no haber sido por que la congelación del agua la había hecho estar desprevenida, probablemente lo habría esquivado de alguna manera, y si no fuera porque la concentración de Shilaria no era tan precisa y letal como habituaba, habría terminado atada como un saco.

Murmura un poco efectivo impedimenta, pero sin embargo gruesas cuerdas se enroscan en torno a ella, oprimiendola el cuerpo pero deteniendo su avance al llegar a su cintura. Morrigan pierde el equlibrio, cayendo hacia atrás y destrozandose parte de su vestimenta. Para colmo, el impacto de la caida hace que pierda la varita de las manos. Genial, ¿es que algo más podía irle peor hoy?

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 3:16 am

Sintió que el agua a su alrededor se evaporaba dejandola seca y el pelo todo había que reconocerlo algo encrespado, la humedad nunca le había gustado por eso, pero que se le iba a hacer no era de las típicas que se preocupan por su imagen. La superficie del lago también se congeló y sintiño un gran alivio, pudiendo relajarse un poco y acercarse a Morrigan, más cerca del lago de lo que le habría gustado,peroeste estaba congelado, debía pensar en ello para que no le entrara un ataque de ansiedad ante el pánico.

Se arrodillo a su lado guardando su varita en el bolsillo trasero de su pantalón y lanzando la de Morrigan lejos, lo más que pudo, sobre la superficie elada del lago, imaginó de quien había sido obra, pero al no haberlo visto no iba a agradecerle nada, es más, para ella, él no estaba allí. Sacó una pequeña daga de plata que a Natahnieldebería resultarle conocida, no salía sin ella, y entró en la mente de Morrigan, burlando la barrera de oclumancia que podría tener levantada con facilidad, e introduciendo en ella, una iagen que no le debería resultar nada agradable, era ella, en ua esquina del callejón Knocktum, con el pelo enmarañado y sucio, ropas desgastadas y piel llena de manchas, algún diente le faltaba y se tapaba con una manta pulgosa posiblemente de algún perro al que ya no le servía.

Minetras torturaba mentalmente a Morrigan con imágenes de ese estilo, con la daga le hizo algunos rasgones en la piel, en principal las piernas, entre los huecos de las cuerdad, y en los brazos, aquello no la desangraría, pero seguramente alguna de ellas, al haber sido con una daga comoesa, diseñada para el sufrimiento en rituales, no se borrarían dado que eso sería uno de los mayores sufrimientos que podría sentir Morrigan, ahora , se disponía a hacerle unos apaños a su cabello.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 3:24 am

Mentalmente intentó fundir algo de hielo del lago para hacer que la varita de la otra mortifaga se hundiera, y ante su sorpresa fue capaz de hacerlo. no la iba a dejar desarmada si había que luchar contra los renegados, pero tampoco le vendria mal un susto. En cuanto la varita estuvo hundida congeló aun más la superficie del lago, haciendo imposible que la dhica corriera a por su varita.
Miró divertido a las dos chicas y rió, esta vez más alto, al ver como la gatita cortaba a la otra y la torturaba psicologicamente. No estaría mal unirse a esa torura, aunque decidió esperar algo más.

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 3:28 am

Abre los ojos desmesuradamente, presa de un terror primitivo y horripilante. Su mente pugna por rechazar aquella imagan, recorándose una y mil veces que no es real, que eso no va a suceder, y que solo es un truco barato de Shilaria, pero entonces siente el dolor, un dolor cruel y lacerante, que muerde su piel ferozmente, algo que nunca había llegado a imaginar; no es solo el dolor, sino la amenaza de las marcas que sabe quedarán impresas en su pálida y perfecta piel, destrozándola, lo que la incapacita, además de saber que aquello no ha hecho más que empezar.

Indefensa, manotea debilmente, buscando retomar el control de su mente, cuando ve a Shilaria acercandose todavía más, y comprende lo que planea hacer a continuación. Su cerebro se rebela ante semejante afrenta, de ninguna manera, su pelo era sagrado pasara lo que pasase. Rechaza parcialmente la espantosa visión que habá ocupado el lugar de sus pensamientos, y una idea se filtra lentamente en su cabeza. Si, podría funcionar.

Haciendo el mayor esfuerzo por concentrarse que había intentado nunca, Morrigan se desaparece, liberándose de las cuerdas que la oprimían y apareciendo a unos metros de distancia. Estaba a salvo, pero no era suficiente, quería venganza por la humillación que acababa de recibir. Se aparece una vez más, ahora detrás de Shilaria; sabía donde había puesto ésta su varita, y Morrigan necesitaba una varita para lo que planeaba hacer a continuación. Se desaparece una vez más, ya completamente agotada, buscando la seguridad del lago helado, con la varita de Shila en la mano, intantdo calmarse y controlar su jadeante respiración. El triste destino de su varita le pasa, por el momento, desaprecibido.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 3:39 am

Aulló de la risa al ver el error cometido por la chica. Se había ido al lago y allí sería una presa facil. Mientras se acercaba al lago, abandonando su escondite entre las sombras, abrió un agujero en el hielo, justo debajo de la chica.
Como mucho sería capaz de agarrarse a la capa de hielo y no hundirse pero no podría evitar caer. Mientras se acercaba lanzaba miradas divertidas a la escena, dejando que su faz lupina tomara un tono de sonrisa.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 3:43 am

No deparó en el hundimiento dela varita de Morrigan, ya que estaba a punto de hacer algo que a Morrigan le dolería mucho más que las heridas que se mostraban en su piel, pero en aquel momento ellase desapareció dejando las cuerdas caer al suelo como si nada hubiesen sostenido, y guardó la daga no la necesitaría hasta volver a tenerla a mano pero lo que más le llamaba la atención era que había burlado la trampa de su mente.

La vió aparecerse y desaparecerse metros más allá, su expresión cansada le resultó una satisfacción que la reconfortó despuñes de lo que había pasado con el agua, aún sentía inseguridad pero ya no era tanta la quela inidaba, incluso había abandonado aquel temblor. Sintió como le quitaban la varita de su paltalón y miró donde se había aparecido Morrigan con un odio sobrehumano.

Se hacercó a la orilla del lago congelado, estaba indefensa sin varita pero no iba a tolerar aquello y la recuperaría por las buenas o por las malas, así que cerró los ojos un instante, el agua al menos estaba congelada y la capa no parecía fina, simplemente confiaba que ahora no le fallase Natahniel. Empezó a caminar lentamente y con pasos muy sinseguros sobre las superficie helada del lago, acercandose poco a poco a Morrigan y abandonando la orilla y las zonas bajas del agua, sintiendo como a cada paso sucorazón más se aceleraba y le planteaba el dar media vuelta, pero ella nunca había sido una cobarde.

Se detuvo en el hielo al vercomo Morrigan caia en un agujero creado en el hielo y se detuvo helada, incapaz de moverse ante aquella imagen.nunca pensó que verlo en los demás tambieén la causaría tanta agonía pero... necesitaba recuperar su varita y aunque fuera por eso siguió avanzando milimetro a milimetro ya que sus extremidades no le permitian más en aquel momento de pánico sobre el agua.

**Morrigan McLendon** Dom Ago 02, 2009 3:51 am

Ve avanzar a Shilaria por el hielo, hacia ella, y por alguna extraña razón esboza una sonrisa cansada. A pesar del dolor que sentía en su maltrecho cuerpo, a pesar de todo lo que había sucedido, merecería la pena si lograba lo que se había propuesto, ahogar a aquel monstruo en el lago. En lugar de eso, el hielo que había bajo sus pies desaparece. Tal vez habría podido asirse a los bordes del agujero creado bajo ella, pero sabe que no está en una lucha justa, y que no tiene posibilidad alguna de vencer.

Aferrando con fuerza la varita robada, cierra los ojos y se hunde, con estoica resignación, en las aguas del lago. Aunque es verano, aquel agua tenía la virtud de estar permanentemente fria, y las capas de hielo habían hecho descender más la temperatura. Morrigan siente como pequeños cuchillos helados penetran como dardos en su cuerpo, un poco más de sufrimiento para el que ya había sentido y todavía sentía. Abre los ojos, encontrando un resquicio de consuelo en todo aquel dolor, y con un supremo esfuerzo sacado de sus últimas fuerzas y su deseo de sobrevivir, pasara lo que pasase, se desaparece.

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 4:03 am

Trago saliva al sentir como Morrigan desaparecia, haber llegado hasta ahí ahora no había servivo de nada y no se sentía con las fuerzas necesarias para dar media vuelta, se tumbó sobre el hielo, la ropa de cuaero la protegería del frío y se dejó arrtrar un par de metros para poder agarrarse al borde del agujero, de ahí no se iba a mover, no podía, solo de pensar que al regresar, un paso en falso podñia hundirla como a su compañera, estaba completamente aterrada, las lágrimas resbalaban insconscientemente por sus mejillas de puro terror y no se atrevía a abrir los ojos si quiera, solo podía aferrarse al hielo e intentar no moverse, mientras su corazón se aceleraba a más no poder, solo con imaginarse la sensación de caer.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 4:07 am

Aun como lobo corrió a donde estaba Shila y cogiendo con los dientes algo de tela de su ropa consigió subirla a su lomo. La llevó hasta tierra firme, a unos 10 metros del lago, y se convirtió en humano. Sentía que la cosa no iba a acabar ahí y sería mejor que Shila no estuviese desprotegida
- Accio varita- Digo apuntando con la propia al lago. Segundos después la varita de morrigan volaba hasta ellos a gran velocidad.- Tenla tú, puede que la necesites.- Volvió a su estado animal de nuevo y mantuvo todos los sentidos alerta esperando la más minima revelación de que la mortifaga había vuelto a aparecer

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 4:14 am

Sintió que algo tiraba de ella y se aferro con más fuerza al hielo sin ser capaz de dejar de llorar y estar apralizada, con el anisia en ellas hasta que de un tirón algo más fuerte logró arrancarla de su agarre y por u istante pensó que se ahogaría que habría sido alguna criatura de lago, pero se sintió sobre algo más peludo y seco,aún sin poder abrir los ojos, se aferró al pelaje del animal hasta sentir tierra a sus pies y abrir los ojos ligeramente , arrastrandose cuanto pudo del agua para ir a una esquina entre piedras, abrazándose las piernas y temblando de pánico mecerse levemente volviendo a cerrar los ojos, sin podere evitar que el miedo siguiese en su interior, no dejando que las lágrimas cesaran, ni siquiera cuando Nate le dió la varita que cogió en un movimiento rápido aferrandola y retomando la postura anterior.

- ¿Por que has hecho esto? - Consiguió balbucear, en un tono bajo y quebrado, completamente aterrado, si no le bastaba con que Morrigan supuese aquello, ahora sería Nate también otra persona que lo supiese.

**Nathaniel W. Moon** Dom Ago 02, 2009 4:19 am

En su estado mediolicantropo era capaz de hablar así que así lo hizo. su voz sonaba diferente a como lo hacía de costumbre, más tosca y grave.
- Lo he hecho por ayudar. En un prinicpio solo pensaba disfrutar de como os torturabais la una a la otra pero te he visto demasiado mal y he echado una mano.- Decirle que no le gustaba verla llorar de terror o temblar no hubiese colado por muy cierto que fuese en ese momento asi que le dijo el pla original.- Y no te preocupes porque sepa esta pequeña debilidad tuya. No saldrá de aqui- Le aseguró sincero

**Shilaria R. Di Vornesco** Dom Ago 02, 2009 4:24 am

Le escuchó hablar, su voz sonaba así másamenaante de lo que parecía y abrió los ojos uninatante abrazandse a él, por mera necesidad, necesitaba el calor de u pelaje, y escuchar sus latidos para poder calmar los sullos, necesitaba abandonar el terror abandonado en cada uno de sus mocimientos, y ahora, abrazabá al medio humano con fuerza, aferrandose al cuello del animal, de rodillas y apoyándo la cabeza soboe el hombro del licántropo, no estaba segura de que aquello fuera lo más seguro, pero preferñia morir a manos de un licántropo a seguir sintiendo el miedo en su interior, y eso es lo que decía cada una de sus lágrimas.
- No debiste hacerlo - Balbuceó temblorosa y entre el llanto silencioso.

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